Series con curvas: ellas tampoco son ángeles

Quienes son activos en redes sociales, se habrán dado cuenta de que existe una movida desde el año pasado en torno a la belleza y a la moda curvilínea o de tallas grandes, un segmento femenino que ha empezado a demandar cada vez más espacios y presencia visual. Desde los años 60, cuando la delgadez se volvió tendencia, los medios optaron por invisibilizar a las mujeres de talla grande, en principio porque lo IN era estar delgada, y luego porque se concluyó que el sobrepeso estaba asociado con problemas de salud.

Pero aunque no estén en la TV o las revistas, siempre han existido millones de mujeres que no encajaban -por diversas razones- con los estándares de belleza que imponía una industria para la que es más fácil fabricar ropa talla 0, y que por años han quedado relegadas, han sido discriminadas de los medios de comunicación, en especial de la televisión, que con aquello de que la pantalla aumenta 5 kilos, simplemente no les permite aparecer allí.

Pero en los últimos años, en gran medida gracias a la democratización de las redes sociales las mujeres de talla grande han ido reapareciendo. El mundo de las fashion bloggers tiene también su círculo curvy y las modelos plus cada vez aparecen con más frecuencia en fotos compartidas por los usuarios de las redes, demostrando su admiración y la necesidad de verse reflejados e inspirados por ellas. Esta semana se volvió viral la campaña publicitaria de ropa interior para este segmento "I'm Not an Angel" de la marca Lane Bryant en respuesta al estándar de belleza que venden muchas otras marcas (Victoria's Secret con sus "'Angeles" hiperdelgados entre ellas). 

Muy sutilmente y en consonancia con la tendencia a la diversidad en los contenidos de TV y las campañas antibullying, también ha habido una aparición de personajes de talla grande en las historias más populares. A propósito de ese tema que parece que dará mucha tela que cortar -y me encanta- recopilé las series que han puesto a las chicas plus otra vez en la pantalla de manera positiva y con mucha gracia.
 

Brooke Elliott como Jane en Drop Dead Diva

1. Drop Dead Diva: protagonizada por Brooke Elliott, la serie trata sobre Jane, una brillante abogada con una vida aburrida, que tiene un accidente en el cual muere. Pero una confusión en el cielo hace que sufra una extraña reencarnación, pues en ella pasan a convivir el cerebro de una modelo tonta con el propio. El resultado es una abogada con mucho sentido de la moda, muy seductora y segura de sí misma, enamorada de uno de sus colegas (ex novio de la modelo). Duró 6 temporadas durante las cuales Jane se enamora, rompe relaciones, gana muchos casos e intenta conquistar a Greyson, y fue un éxito de audiencia entre las mujeres en Estados Unidos. En entrevistas, Brooke Elliott ha hablado de la importancia de tener una buena autoestima y ha dicho que "le encanta su cuerpo".
Cómo verla: en Netflix.

Christina Hendricks

2. Mad Men: Joan Holloway, interpretada por Christina Hendricks, es el personaje más hot de la serie, la que más despierta comentarios subidos de tono, y hasta llegado a eclipsar a las otras mujeres del elenco. Aunque algunos duden si meterla en el saco de las mujeres plus, Christina viste talla 44 y ha sacado amplio provecho de la moda de la serie que tan bien le sienta, al punto que casi siempre la vemos en las alfombras rojas en vintage. Su presencia es sencillamente stunning y ella dice «estoy muy a gusto en mi propia piel; me lo transmitió mi madre que era toda curvas y determinación».
Cómo verla: Está al aire su última temporada por AMC en USA y por HBO en Latinoamérica pero puedes verla desde el principio en Netflix o HBOGo. 

3. Orange is the New Black: ya he hablado de la diversidad en esta serie antes. Hay mujeres para todos los gustos. Una de ellas, una latina llamada Dayanara, protagonista de la historia de amor más importante de Litchfield, es interpretada por la curvilínea Dascha Polanco, de origen dominicano, que se ha convertido al mismo tiempo en abanderada de la comunidad hispana inmigrante y de las chicas grandes. Tiene una vida social muy activa y sus looks en los eventos siempre dan de qué hablar. 

Foto tomada de la cuenta de Dascha Polanco en Instagram @sheisdash

La otra es Taystee, encarnada por Danielle Brooks, cantante y actriz desde jovencita. Representa a la comunidad afroamericana y basta ver sus fotos en el Instagram oficial de la serie (@oitnb) y en el propio para saber que Danielle se siente (y se viste) fabulosa.

Foto tomada de la cuenta de la actriz en Instagram @daniebb3

Cómo verla: Netflix es la respuesta.

Lena Dunham

 



4. Girls: detrás y al frente de esta serie muy alabada por la crítica sobre la transición de un grupo de mujeres llenas de imperfecciones hacia la adultez, está Lena Dunham, como creadora, guionista, productora, directora y protagonista, lo que le ha valido la comparación la genial comediante Tina Fey. La serie es tan irreverente como ella y se ha dado el lujo hasta de aparecer desnuda. Ha aparecido en las portadas de Vogue y Vanity Fair que han citado "entiendo que haya gente a la que no le gusten los gordos. Pero odiar mi cuerpo no va conmigo. Y estoy encantada". Sus looks en las red carpets no han sido tan apreciados como los de otras y es en verdad exhuberante, pero ella asegura que se divierte a su manera con la moda. 
Cómo verla: la tienes en HBO y HBOGo.
5. Cristela: Cristela Alonzo, de origen mexicano, es la primera latina en crear, producir, escribir y protagonizar su propia serie en primetine en los Estados Unidos, después de hacer una carrera en el mundo del stand-up comedy. Parece que el peso no es el mayor de los obstáculos de su personaje, uan abogada en ciernes que debe enfrentar prejuicios acerca de su origen. Cristela enfrenta lo que se diga de su cuerpo con humor con tweets como estos: "Todos tenemos six-pack abs ... es sólo que algunos de nosotros llevamos en forma de sifón".
Cómo verla: en USA se puede ver a través de ABC. En Latinoamérica aún no está disponible pero estaremos atentos para avisarles. 

Cristela Alonzo

 Pueden conocer más de la campaña I'm not angel a la que hago referencia al principio aquí.